El 70% de los hombres españoles estaría de acuerdo con que el permiso por maternidad y paternidad fuera obligatorio y de la misma duración para ambos. En la actualidad, el permiso de paternidad es de entre 13 y 15 días según convenio, mientras que el de maternidad es de 16 semanas. Además, el 91% estaría dispuesto a cogerse su baja por paternidad, llegado el momento. El motivo, en el 74% de los casos, porque quieren compartir con su pareja los primeros momentos de sus hijos y en un 23%, porque quieren ejercer sus derechos como padre. El 9% de hombres que no estaría dispuesto a cogerse su permiso de paternidad afirma que el motivo es que son imprescindibles en su puesto de trabajo.

Estos datos pertenecen a una encuesta online realizada por CVA entre una muestra representativa de hombres entre 25 y 50 años, bajo el epígrafe Ejercer de padres. El objetivo es conocer el grado de implicación de los hombres en la responsabilidad sobre sus hijos y cómo viven la conciliación.

Las responsabilidades, mejor compartidas
Los datos de la encuesta revelan que en general los hombres están dispuestos a hacerse cargo de sus hijos, llevarlos al pediatra o cubrir otras emergencias en el ámbito familiar, siempre que esta responsabilidad sea compartida. Así, ante la pregunta realizada a los hombres de la muestra que tenían hijos, sobre quién lleva al niño al pediatra, sólo el 4% reconoció que lo llevaba él. En el resto de los casos, se encargaba su pareja o en todo caso acudían los dos.

A la pregunta referida a quién se queda en casa cuando hay un imprevisto familiar, de nuevo sólo el 16% reconoció hacerse cargo; mientras que el resto afirma que es su pareja la que se responsabiliza en esos casos. Respecto a quién asiste a las reuniones escolares de los hijos, de nuevo sólo un 17% reconoció hacerse cargo de esta responsabilidad familiar.

Los datos de la encuesta revelan también que un 44% de los hombres llegan a su casa entre las 18 y las 20 horas y que un 30% lo hace entre las 20 y las 22 horas. En esta circunstancia, se preguntó a los hombres de la muestra si en sus empresas había implantadas políticas de flexibilidad y el 65% respondió que sí. No obstante, son los hombres con hijos de la muestra los que más se han interesado por conocer cuáles son esas políticas. Así, mientras un 89% de los hombres con hijos las conocen, el 72% de los que no tienen hijos no sabe cuáles son.

Según Marisa Cruzado, consejera delegada de CVA, las empresas siguen trabajando en la implantación de políticas de flexibilidad que favorezcan el equilibrio de la vida profesional, personal y familiar. “A través de iniciativas como los Premios Empresa Flexible se detectan y difunden las mejores prácticas que son un beneficio para el empleado y también para la organización, que obtiene unos mejores ratios de productividad, motivación y beneficios”. El reto está en asumir que las medidas de flexibilidad están pensadas para todos los empleados, hombres y mujeres, sea cuál sea su opción de vida y tienen como objetivo que puedan cumplir sus responsabilidades profesionales y también las personales y familiares.